Las plantas, como los aceites, también tienen propiedades hidrantes, nutritivas y reconstructoras. Sin embargo, las plantas se utilizan de muy diversas formas, ya sea, a través de infusiones, aceites o estratos, y de estas se pueden aprovechar diferentes partes. Acá estaremos abordando diferentes ejemplos.

En el mundo de la cosmética los productos se formulan en función de las necesidades de las pieles de los clientes. Por sus características, hay cuatro tipos básicos de piel sana: seca, normal, mixta y grasa. Saber reconocer el tipo de piel que se posee es muy importante porque así podremos escoger cuáles son los productos que necesitaremos para el cuidado de ella.

Lo primero que hacemos cuando estamos en etapa de transición es concientizar que no hay marcha atrás y, sobre todo, concentrarnos en el look que queremos para llevarlo lo mejor posible. Estamos hablando de un cabello que en estos momentos tiene dos texturas.